Esa noche dormí con el Mantra Om Manah Shivaya en mis Altavoces, mientras Revelaciones me fueron mostradas: En una Pantalla de Grandes Dimensiones detrás de la Vidriera de una Extraña Tienda de Abarrotes, vi la Tribulación y el Sufrimiento de todos los Seres Vivos Sobre La Tierra, de todas las Razas y las Especies, donde La Tierra, (¿cuál Tierra?) sería Purificada con Glaciación y Fuego; pero también, finalmente, vendrá la Recompensa de los Justos, escogidos por el Señor para disfrutar por la Eternidad de un Paraíso plácido y tranquilo, todos convertidos en un solo ser. Entonces el Tendero y su Hijo me infligieron con violencia una Grave Herida en la Cabeza para impedir mi visión. A continuación un ser que creo se trataba de un Ángel enviado por Dios para hablarme, con la forma de una mujer de apariencia humilde y de mediana edad, algo robusta y ceñida con un atuendo de color rosa y el acostumbrado velo cubriendo su pelo, no dejaba de mirarme fijamente con sus grandes ojos marrones anegados en lágrimas. Con notoria preocupación por mi bienestar, veiáse conmovida y compungida por las tantas penurias, dolores y torturas pasadas, presentes y futuras que constantemente se me infligen. Me invitaba a abandonar los principios pacifistas y de amor universal que me caracterizan, como una exención otorgada a mí por Piedad y Gracia del Auténtico Creador, para que mi martirio acabase; pero me negué, y espero tener la Fuerza de continuar haciéndolo. Indudablemente esto se trató, no tanto de una Epifanía, pero sí de una Experiencia Religiosa con la que Dios compasivamente me bendijo. gloriaymelvin
